lunes, 9 de marzo de 2009

Actividades de Marzo y Abril de 2009

· Día 13 de Marzo, 19.30 a 21.15 horas, diálogo de investigación: “El nacionalismo y la crisis actual”
· Día 3 de Abril, 19.30 a 21.15 horas, diálogo de investigación: “La comprensión”
· Día 24 de Abril, 19.30 a 21.15 horas, proyección de DVD y diálogo: “La atención y la libertad interior (I)”.

1 comentario:

Anónimo dijo...

En relación con la última reunión, adjunto unos extractos de charlas de Krishnamurti muy relevantes en relación a lo hablado.

OJAI, 15 MAYO 1980

Pregunta: ¿Que relación existe entre la atención y el pensamiento?

K: Ninguna, obviamente. En la atención no tiene cabida el pensamiento, simplemente atiendo.
No podría haber pensamiento si hubiera amnesia total. El pensar ocurre como una reacción de la memoria. La experiencia se convierte en conocimiento que se almacena como memoria y esa memoria responde como pensamiento. La memoria es pensamiento. El conocimiento, por amplio, profundo y extenso que sea, siempre será limitado ya que forma parte de la ignorancia, son dos partes de la misma cosa por lo que el pensamiento es siempre parcial, limitado, divisivo, porque en sí mismo no es completo
El pensamiento no puede prestar atención porque la atención consiste en entregar toda nuestra energia sin limitación alguna. En la atención no hay un YO que atienda, no hay un centro que diga debo atender. Si prestan atención encontrarán que sus problemas han desaparecido, al menos por el momento, por lo tanto, resolver problemas es prestar atención.

La mente, toda la estructura del cerebro, necesita estar ocupada en algo porque si no lo está nos sentimos vacios, perdidos, nos damos cuenta de que hay una tremenda soledad interna. Por consiguiente, a fin de evitar esa profunda soledad, la mente parlotea, se ocupa de todo lo demas excepto de esa sensación de soledad. Sí mi mente está parloteando, observaré eso. Diré: muy bien, parlotea, pero prestare atención, lo cual quiere decir que no estoy tratando que no parlotee. No digo que debo reprimir eso, simplemente presto atención al parloteo. Entonces la mente se aclara, libre de todo eso. Y probablemente ese es el estado de un ser humano sano y normal.

OJAI 3 MAYO 1981

La crisis a todos los niveles que hay en la sociedad está en nuestra conciencia, y esa conciencia es el suelo común que comparte toda la humanidad. La conciencia es un produnto del pensamiento. No es una conciencia particular, sino del ser humano en general. Es muy importante que se comprenda porque nos hemos separado a nosotros mismos como individuos pero en realidad no lo somos. Somos el resultado de un millón de años en los que se nos ha alentado a aceptar la idea del individuo, pero cuando observamos detenidamente, vemos que no somos individuos; cada uno de nosotros es, psicologicamente, igual al resto. De modo que el mundo somos nosotros y cada uno de nosotros es el mundo. La individualidad es un producto del pensamiento.

La crisis está en la naturaleza misma del pensamiento. El mundo externo y el mundo interno del hombre son producidos por el pensamiento. El pensamiento es un proceso material. Primero surgen las respuestas sensoriales cuando uno se encuentra con algo que constituye una experiencia, esa experiencia se registra como conocimiento, ese conocimiento se almacena como memoria, y de esa memoria surge el pensamiento.

Nuestros cerebros, por vivir en este ciclo de experiencia, conocimiento, acción, memoria y más conocimiento, tienen problemas porque el conocimiento es siempre limitado. Y como el conocimiento es siempre limitado y nosotros estamos siempre actuando dentro de ese campo hay un conflicto perpetuo. Tratamos de resolver un problema y la solución misma de ese problema genera otros problemas. Y entonces acudimos a la fé, la creencia que atrofia el cerebro. Solo la mente libre que no tiene problemas puede afrontarlos y resolverlos inmediatamente. Y, entonces, surge la pregunta: ¿ Como es posible estar libres del conflicto cuando el pensar es el instrumento que crea nuestros problemas? Con la atención atenta observacion de la realidad interior y exterior.