* Viernes 11 de Enero a las 20.00 horas: Diálogo de Investigación: "El viejo y el nuevo cerebro"
El
viejo cerebro, nuestro cerebro animal
Pienso
que es importante comprender la operación, el funcionamiento, la actividad del
viejo cerebro. Cuando el cerebro nuevo opera, el viejo cerebro no puede
comprender al cerebro nuevo. Sólo cuando el viejo cerebro, que es nuestro cerebro
condicionado, animal, el cerebro cultivado a lo largo de los siglos, que busca
perpetuamente su propia seguridad, su propio bienestar, sólo cuando ese viejo
cerebro está quieto, verá usted que hay una clase de movimiento por completo
diferente, y este movimiento es el que va a originar claridad. Este movimiento
es en sí mismo claridad. Para comprender, debemos comprender el viejo cerebro,
darnos cuenta de él, conocer todos sus movimientos, sus actividades sus
exigencias, sus búsquedas; por eso la meditación es muy importante. No me
refiero al sistematizado, absurdo cultivo de cierto hábito de pensamiento y
todo eso; es demasiado inmaduro e infantil. Por meditación entiendo comprender
las operaciones del viejo cerebro, vigilarlo, conocer sus reacciones, sus
respuestas, sus tendencias, sus requerimientos, sus búsquedas agresivas;
conocer todo eso, tanto la parte consciente como la inconsciente. Cuando usted
conoce eso, cuando lo percibe, sin controlarlo ni dirigirlo, sin decir: «Esto
es bueno, esto es malo; me quedaré con esto, no me quedaré con aquello»; cuando
ve el movimiento total de la mente vieja, cuando lo ve por completo, la mente
se aquieta por sí misma. (Krishnamurti)